Tras la ardua batalla , Etíocles se había encargado de tomar los barcos y todo lo que había en su interior , desde oro y bienes materiales que le ayudarían a pasar bien la guerra hasta esclavos , a los cuales liberó y junto a una patrulla de cien soldados les indicó que fuesen llevados a Esparta para que fuesen entrenados .
Cierta era que para poder estar en el ejército espartano se debía ser espartano se nacimiento , pero a esas alturas cualquier soldado valía , siempre que no abandonase el campo de batalla
Antes de que partiese la escolta con los esclavos romanos , Etíocles escribió una carta para su amada , una carta en la que reflejó los primeros días de combate , el sufrimiento y la muerte , en la cual se estaban dando los orígenes de la guerra .
La carta de Etíocles decía lo siguiente:
'' Mi querida reina . Han pasado días desde que me fui y te dejé sola en Esparta , sé que fue difícil de asimilar , pero no me fui por gusto , si no por deber , por el deber de encontrar la paz para Grecia y la seguridad suficiente para que tú y nuestros futuros hijos tuviesen la oportunidad de tener una vida decente , fuera de la guerra y la violencia .
No hay día que no piense en ti , desde primera hora del amanecer hasta el ocaso .Espero que no te encuentres sola , ni que estés preocupada , ya que tenemos la suerte de no haber tenido ni una sola baja en nuestro ejército , sabemos defendernos , y hemos conseguido bastante oro , comida y agua para aguantar y enriquecer a Esparta . Con suerte me tendrás allí dentro de tres días , en caso de que la suerte y los dioses nos abandonasen , estaría allí en quince días , pues debemos poner mucha resistencia , pero a este ritmo se cansarán ante los romanos que nosotros .
Te extraño , mi reina ..''
Etíocles le entregó a Castos la nota , y castos , fiel mensajero y amigo asintió y sonrió , montando en el caballo y retomando el camino hacia Esparta , el cual recorrió en cinco días , debido a todas las paradas que tenía que hacer con el ejército y los esclavos , que estaban agotados y sedientos .
Una vez allí se dirigió primero a uno de los generales del ejército , que estaba entrenado a dos pelotones más de unos mil soldados en total , pocos eran , la cifra de soldados para entrenar ahora estaba en quince mil soldados y subiendo . Desde que Etíocles formó algunos edificios de protección y entrenamientos la cantidad de personas fueron aumentando , tanto las hembras como los barones estaban creciendo de una manera desmesurada y por suerte habían muchos generales entrenando al ejército , así que tanto la ciudad como su gente estaban a salvo de cualquier invasión .
~ Emírides , viejo amigo , te traigo una carta de nuestro rey , por lo visto está muy orgulloso de tu trabajo con los soldados , eres bueno entrenándolos , son fieros y resistentes- El joven de cabellos rizados y ojos verdes entregó en mano la carta a Emirides , que la miró con una sonrisa y se la dio a uno de los soldados , que la leyó en alto a todos los soldados que entrenaban .
~ Hacemos lo que podemos , por suerte aprenden rápido , muy rápido , aun que haya que empezar desde pequeños con ellos , son chicos muy valientes , la verdad .- Se acercó a él lentamente y posó una mano sobre su hombro , dándole tras eso un leve abrazo .-¿ Algo más?
~ No , sólo una carta para la reina Helena , voy a entregársela y tras eso iré a Troya , Tebas y Atenas ,para avisar de lo que se avecina..~Tras despedirse ambos Castos se dirigió hacia la casa de los reyes , algo alejada de la ciudad y una vez allí entró por el patio porticado hasta la sala donde se encontraba la habitación de Helena , una vez allí llamó varias veces y pasó.
Lo que verían sus ojos esa noche sería algo que no vería nadie en siglos .
Helena se encontraba recostada sobre la cama , con tres hombres a su alrededor , uno de ellos entre sus piernas , con los pies atado a la parte de los pies de la cama y otros dos hombres atados a dos barras de hierro de la pared , cubriendo de besos el cuerpo de ella , junto a dos soldados que estaban obligados a cubrir la entrada . Uno de ellos se dirigió hacia Castos y agarró su mano , quitándole el manuscrito de la cama , para después sacarlo fuera de la habitación a base de empujones .
Helena se levantó enseguida dejando a sus ''amantes'' atados a la cama , mientras corría ahora tras Castos que caminaba a paso ligero hasta su caballo . Una vez cerca lo agarró del hombro , tapada con sus mantas y lo miró con lágrimas en sus ojos .
~ No le cuentes nada a mi marido , me sentía sola y..~Antes de decir nada Castos se alejó de ella y montó a caballo , mientras se encaminaba hacia la salida de esparta , entre las voces de Helena que ahora le insultaban y le amenazaban de una manera muy agresiva .~ ¡¡ SI MI MARIDO SE ENTERA JURO QUE CORTARÉ TU CABEZA Y ME COMERÉ TODA TU PIEL , PERRO !!
Helena se había vuelto loca , loca y pervertida , pues lo que había hecho no tenía perdón ni para ella ni para su reino , y si se llegase a enterar Etíocles ella no sabría que hacer , le gustaba demasiado el trono , el dinero y todo el poder que concentraba , así que debería andarse con cuidado tanto ella como Castos , el mensajero.
HELENA ES UNA ZORRA!! EL POBRE ETIOCLES PARTIENDOSE LA ESPALDA POR PROTGER ESPARTA Y ELLA COMO UNA PUTA!!
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