sábado, 26 de abril de 2014

Nuevo..

En estos días de la semana en el que tengo poco tiempo para poder relataros la historia de nuestros héroes he decidido hacer una serie en la que os daré pista de lo que podría pasar en esta semana que viene , con  palabras claves e incluso una fracción de la historia .







ESTA SEMANA NUESTROS HÉROES ESTARÁN BAJO EL PODER DE ADRIANA , ENCERRADOS EN UN CALABOZO Y APUNTO DE SER CONDENADOS A MUERTE...¿ SE SALVARÁN ?

miércoles, 23 de abril de 2014

De camino a Siracusa...

El camino no resultó complicado . El mar estaba a su favor , como el viento , los dioses y la suerte le sonreía y si Aníbal se  hubiese callado y  se hubiese dejado de gritar e insultar durante todo el viaje,  habría sido hasta perfecto , pero por desgracia él no se cayó nada , soltó toda la ira que llevaba dentro hasta que de nuevo cayó la noche y volvió a descansar en la cama .


Etíocles miraba desde su mástil  a todo el que pasaba frente a él , desde los que llevaban el barco , hasta sus soldados , que se encargaban de armarse con las armas que le quitaron en la batalla  , sus escudos y espadas , muchos otros se levaban y se quitaban las costras de sangre seca , sudor y tierra y limpiaban sus heridas .
Etíocles se separó lentamente del mástil y se dirigió hacia Paulos , que estaba preparando una especie de estrategia de ataque sobre un papel , mientras Stelio le ayudaba y aportaba ideas para poder realizarlo de una manera perfecta .


~ Deberíamos coger a nuestros soldados , dejar a los esclavos dentro del barco y prenderle fuego con ellos dentro , para que así piensen que es un barco enemigo y cuando se estrelle contra el puerto destroce el mismo  y salga todo ardiendo ..- Dijo  Paulos , mientras trazaba el plan con una  mina , con un carboncillo .



~  Lo primero , los esclavos son personas como nosotros  , así que no hay por qué sacrificarlos , cuando podemos armarlos . Segundo , si lanzamos el barco ardiendo nosotros estaremos en agua y seremos vulnerable a cualquier ataque , las armas solo nos hundirás . Y tercero..¿Por qué tanto fuego ?-Dijo Stelio , retirando la mano de Paulos para asegurarse del ataque por si mismo.~ Nos esconderemos en las celdas , dejaremos que lleguen la reina y sus soldados y cuando estén arriba nos separaremos del puerto y atacaremos la borda desde abajo , como acabamos de hacer .



Etíocles llegó por detrás y agarró el trozo de papel , lanzándolo por los aires para hacer que cayese al mar y tomase una ruta de barco , mientras el joven  los miraba y negaba lentamente con seriedad , agarrando tras eso el carboncillo para guardárselo y mirarlos .


~ No morirá nadie más , no hasta que no entremos en palacio y me lleve lo que me pertenece ..-Dijo mirándolos con seriedad , haciendo una señal para que parasen el barco durante un momento , sólo para poder concentrarse , pues los barcos le mareaban desde pequeño.


~ ¿ Qué es lo que te pertenece? ¿ Sus riquezas ? ¿ Su mujer? - Dijo Paulos , mirándolo cabreado , pues no le gustaba que le hiciesen daño a sus planos cuando el chico  los terminaba , pues le parecían buena idea  para las defensas .


~ Sus esclavas y las respuestas que todos queremos ...-Dijo Stelio , cruzado de brazos mientras lo miraba con seriedad, él buscaba lo mismo , lo mismo que buscaba toda Grecia.- ¿ No es así?



~ No entiendo para que necesitamos las esclavas ..- Dijo Paulos , atusándose la barba  , la cual le había crecido con abundancia y  cada vez era más larga de lo que recordaba.


~ Esas mujeres se merecen ser libres , como éstos hombres . Y la respuesta es simple ..quiero saber que pretenden hacer intentado conquistar Grecia ..-Etíocles le dio una rápida respuesta , que hicieron que se quedasen pensativos por completo .


~ ¿Buscan nuestro oro ? -Dijo Paulos , pensativo aún , pues él sabía muchos ingresos de Esparta desde que Etíocles llegó al poder .


~  Buscan siervos de la guerra , por eso sólo se centran en Esparta - Dijo Stelio  , mirándolo a los ojos cuando Etíocles hizo una señal para avanzar  de nuevo

lunes, 21 de abril de 2014

Un arduo camino a Siracusa..

Los muchachos habitaban celdas inhumanas , sucias ,  que olían fatal  y que atraía a una cantidad de insectos que no era normal . A  parte la humedad de la madera y del mismo barco hacía que estos se llevasen el día  entro dolores y lesiones , pues las articulaciones lo estaban dejando por los suelos  , estaban muy doloridos por aquel motivo , lo que les impedía  moverse apenas , y a veces levantarse , para poder pedirle a uno de los soldados agua , que era lo que necesitaban los tres , pues la verdad es que Aníbal los trataba  mal a propósito , a pesar de que su mujer Adriana le había dado órdenes exactas de que debían llegar vivos los tres , tanto el rey como sus tres generales.


~ Romano , tenemos sed , dadnos agua si no quieres que vaya yo a buscarla..-Dijo Paulos , agarrando los barrotes de hierro , sonriendo con malicia , pues era lo que mejor se le daba para sacar información y lo que necesitaba .


~ No  , siéntate , pronto llegaremos a Siracusa .-El soldado siguió al lado de la celda , agarrando su lanza  y mirando a su compañeros , que se dedicaban a jugar con  sus cuchillos ,  pasándolos mediante puñaladas entre sus dedos , para ver quien se cortaba antes.


~ Queremos agua , romano y si no me la das ahora , te arrancaré el cuello..-Dijo Paulos , mientras Stelio lo agarraba del hombro para que se tranquilizase.


~ Estamos rodeados de romanos y cartagineses , así que ten la decencia  de cerrar ese pozo que tienes por boca -Dijo Stelio , mientras lo apartaba de la celda .


En seguida reaccionaron y comenzaron a agarrarse entre ambos , a base de insultos y puñetazos , que hicieron que los soldados cartagineses se acercasen hasta donde estaba  , separando a los romanos que  animaban la pelea para entrar en  la celda y separarlos , pero nada más abrir la puerta  Etíocles agarró la espada de uno de los soldados y la clavó sobre el mismo , rajándole el cuello a otro mientras Stelio y Paulos domaban y atacaban a los otros dos romanos , que pronto cayeron al suelo  y fueron amordazados , mientras Etíocles liberaba a otros cuantos prisioneros y los armaban con armas de los muertos .



~ Tomaremos el barco  , pero nos dirigiremos a Siracusa -Todos los soldados asintieron y salieron al exterior , encargándose de unos cuantos hombres  de la borda , que pronto cayeron al suelo muertos . Etíocles subió con su espada en la mano y agarró una de las lanzas que había dejado uno de los soldados , mientras pasaba la misma por  las puertas donde dormía Aníbal , atrancándolas  para que no abriese las puertas y les estropeasen el plan .~ ¡ Rumbo a Siracusa !





~ Etíocles , tengo una pequeña duda sobre tu plan..-Dijo Stelio , limpiando su espada con la capa de unos soldados  muertos , mientras subía hasta el gran remo de la parte trasera y lo miraba .- No sabemos manejar un barco  , no sabemos por donde ir a Siracusa , y tampoco sabemos que debemos hacer  al llegar .


~ Yo no , pero ellos sí saben -Dijo Paulos , apuntando a los esclavos , que pronto se reunieron frente a Etíocles y lo miraron , esperando a recibir órdenes  a cambio de lo que habían hecho.- Llegaremos , bajaremos del barco como si estuviésemos atados y escaparemos .



~ Para eso nos volvemos directamente  y matamos a la princesa guerrera que dormita bajo nuestros pies ¿ no crees? -Dijo de nuevo Stelio , apoyando en el hombro de Etíocles , mientras éste  seguía el rumbo marcado , pensativo . - Piensa con la cabeza y no con la espada , idiota .



~ Te voy a dar tal patada que vas a beber todo el agua que antes no bebiste..-Dijo Paulos , mirándola con una sonrisa , algo amenazadora , pues él no solía sonreír .




~ ¡ Callaos bestias  ! - Dijo Etíocles , separando a los dos , mientras Stelio cogía el timón .- Tengo que pensar que hacer..

domingo, 20 de abril de 2014

Llegué demasiado tarde , demasiado tarde..

Todo el camino de Esparta a la zona de guerra fue un remordimiento constante  , un remordimiento que fue cuanto menos un dolor de cabeza , un dolor de cabeza que se convirtió en una enfermedad que taponó sus pensamientos y le prohibió pensar más de lo que podía , no podía pensar en nada  más en que lo su mujer le había hecho , molestarle , insultarse , meterse con él sin decir palabra , era el   bufón de toda la corte Espartana  , un bufón que pronto se convertiría en preso ¿ Y cómo lo sabía ? por que si no lo capturaban él se entregaría  , pues lo que era su vida pronto tornó  a una vida  oscura  y a un tiempo   al que no volvería en su vida .



Cuando llegó a la zona de combate  todo estaba ardiendo , muchos de los soldados en el suelo , muertos , otros empalados por lanzas y Stelio y Paulos atados a una fila de soldados espartanos supervivientes  mirando a los soldados y fustigadores que le obligaban a los presos a moverse . Aún así  Etíocles no paró el combate , bajó del caballo y agarró su espada y su escudo , lanzándose ante  un grupo de soldados , liándose a espadazos para llevarse con él a tres soldados , mientras otros tres se avalanzaban contra él de una manera agresiva  , haciendo que cayese al suelo entre voces  e insultos , mientras , lo arrastraban  con los demás .



~ Perros..perros.. ¡ Soltadlo perros ! - Stelio intentó salir de la fila , pero  Aníbal bajó de repente de barco y de un latigazo lo tiró al suelo con un corte en la  mejilla , mientras posaba su pie en el pecho de ella .- ¡ Eres un maldito asqueroso ! ¡ Maldito leproso !



~  Aníbal , tu pelea es conmigo no con él..-Aníbal se giró lentamente , fijándose en como habían reducido a los demás y sobre todo al importante a Etíocles  .Se acercó a  éste lentamente  y le cruzó su rostro de un tortazo , mientras acariciaba con una sonrisa su mejilla .~ No creas que Esparta va a caer , no creas que yo voy a caer , no en tus manos..-Escupió su rostro y acto seguido recibió otro golpe de Aníbal que lo tiró al suelo.


~ ¡ Cállate , no te he dado permiso para hablar ! -Lo agarró el cuello y lo lanzó contra el agua , mientras se acercaba lentamente y hundía su rostro en el agua , en la arena de la orilla , sacándola ahora mientras le agarraba de sus cabellos.- ¿Sabes todo lo que hemos pasado para llegar aquí ? -Dijo mirándolo con furia.- ¿ A todos los hombres que hemos enviado y no han vuelto ? - Dijo acto seguido , lanzándolo contra la arena , indicando a dos soldados que lo agarrasen -  Hoy se cumplirán los sueños de reduciros a cenizas y  que Esparta no sea más que una ciudad de esclavos cartagineses..



~ Mientras..-Tosió varias veces , para después continuar .- tú hablas..un ejército superior se acerca para ayudarnos..-Rió mirándole  , señalando con su mirada los estandartes que se acercaban por el fondo , y como Adelos se acercaba en caballo junto a Delio con sus muchos soldados atrás.



- ¡¡ NO , VOLVED ATRÁS , VOLVEMOS A SIRACUSA !! -En seguida montaron a Stelio , Paulos y Etíocles en el barco , mientras otros soldados eran aplastados por el ejército griego .




Las siguientes semanas de viaje fueron desesperantes,  los tres atados de pies y manos en pequeñas celdas donde apenas se cabía , los tres agobiados y los tres apunto de estallar en ira , necesitaban salir de allí , pero no podrían , no les sería nada fácil.

viernes, 18 de abril de 2014

Maldita fue la hora..

Etíocles llegó relativamente pronto a Esparta , algo que era inusual , pues para muchos el camino a Esparta era arduo y costoso , pues fuera a parte de estar muy lejos  era un sitio lleno de peligros , muchos bandidos mataban soldados , raptaban mujeres y secuestraban niños sólo por diversión y otros muchos por necesidad , pero por suerte Etíocles no se encontró con ninguno , casi todos temían el poder del ejército  Espartano desde que el mismo lo llevaba .
Consiguió llegar hasta la entrada trasera de la ciudad  , dejando su caballo en la parte trasera , atado a un árbol , mientras el mismo tenía para pastar y beber . Bajó de su caballo lentamente y tras eso se dirigió entre los trigales a la casa donde se encontraba al final del todo la habitación de Helena  y la suya .
Fue apartando  las ramas de trigo con sus manos  y pies hasta poder llegar al final  de todas las filas , posándose en la segunda de ellas , en posición al ventanal de la entrada  , donde se veía perfectamente la habitación llena de hombres y mujeres  . Todos se besaban , se abrazaban y se removían por el suelo , divanes y algunas camas de paja repartidas por la habitación . Etíocles comenzó a maldecir , aunque le quedaba todavía por ver lo peor .
Se dirigió hacia una zona más cercana , justo a la derecha  , donde pudo situar su cama y sobre la misma tres hombres , tres hombres que se lanzaban cual fieras bestias sobre Helena y le daban todo lo que parecía que Etíocles no podía darle  . Ella sonreía  , y los chicos también , eran soldados jóvenes  , pero no espartanos , pues al lado de la cama habían tres escudos romanos y un casco de centurión .








Etíocles se sentía ahora sin fuerzas , sin ánimos , sin alma . Le había dado todo , el poder que ella jamás conseguiría , el dinero , el poder  sobre Esparta y la gloria de ser la mujer de uno de los mejores reyes y soldados de su ciudad . ¿ Qué le dio a cambio ella?. Infidelidad , deshonra y lo más importante , unos cuernos más grande que los de un minotauro .
Ya bastaba por aquella noche , no aguantaría más espectáculos , ni esperaría del regreso del ejército a Esparta , sólo esperaría  a salir de aquellos matorrales de trigo .



Lentamente salió de entro los mismos , deshaciéndose de su capa roja  y de su espada  , entrando en la habitación sin que ninguno lo notase , atrancando el ventanal y tras eso la puerta de salida , montándose sobre la cama para agarrar por el cuello a dos de los tres soldados y lanzarlos fuera de la cama , sobre una pareja de chicas que había , que se pusieron en pie rápidamente  , sorprendidas .



 -¡ Etíocles ! ¡ Te echaba de menos , mi amor ! - Helena no sabía que decir , estaba petrificada , mirando a Etíocles , que exhalaba la rabia que había  dentro de él . Se puso en pie lentamente y se acercó para besarle , pero antes de poder hacerlo Etíocles le cruzó la cara de un revés con su mano .




~ Así que dejo mi vida allí fuera , esperando a regresar para darte todo lo que necesitabas , doy la vida de mis amigos , mi propia vida  y todo el dinero para contentarte y tú me recibes con esto , con infidelidad  y con romanos ..~ Se puso en pie sin expresión alguna en su rostro , agarró la gladium que había en el suelo , la desenvainó y miró su filo , mientras ella gritaba .


~  ¡¿ Qué haces  ?! - Dijo Helena llorando , poniéndose en pie rápidamente , cayendo en poco tiempo al suelo tras otro revés que le dio Etíocles .


~ Llena estas armas de sangre injustas..- Acto seguido de una sádica sonrisa cortó de una tajada las dos cabezas de los soldados romanos , atravesó tras eso al centurión y acabó con una escabechina  dentro de la misma habitación , manchando paredes  y ventanas de sangre  y vísceras , dejando a Helena gritando sobre la cama , llena de sangre . Tras eso la agarró del brazo con fuerza y la llevó hasta la puerta de la casa , donde la cogió del pelo y gritó llevándola hasta el pozo  , haciendo que todos los espartanos y espartanas  saliesen de sus casas para llegar hasta el pozo sin fondo que tenían al final de la ciudad .~ Diles lo que has hecho , perra ¡ DÍSELO A TODOS !



Helena lloraba desconsolada , avergonzada , pero dispuesta a vivir y sabía que si decía la verdad Etíocles la perdonaría , así que no le quedo más remedio que gritar  a todos lo que había  hecho , en que se había equivocado .


~ ¡¡ HE ENGAÑADO A MI MARIDO , A VUESTRO REY !! ¡¡ PERDONADME , OS LO SUPLICO !! - Mientras ella gritaba el pueblo exclamaba y los miraba sorprendidos , cuchicheando cosas de fondo , mientras se miraban asustados .


Etíocles la soltó frente al pozo y ella se puso en pie lentamente , aún desnuda , llorando y pidiendo a Etíocles que la perdonase , mientras besaba su hombro y acariciaba su cuerpo , esperando a que se hablandase . Por eso Etíocles se giró lentamente , mirándola , aún llorando y sonrió lentamente .



~ Te perdono..~Dijo sonriente , viendo como Helena sonreía y sus ojos volvían a brillar de alegría.-  Pero espero que la muerte no lo haga..-De una patada en el pecho la lanzó al pozo , donde se escuchó unos gritos tremendos , que hicieron que todo el pueblo se quedase callado.

jueves, 17 de abril de 2014

La furia lo llevo entre rejas..

 Mientras el ejército descansaba Etíocles preparaba más armas , junto a  algunos soldados ya descansados , que le ayudaban  a afilar  unas picas de madera , que eran a parte de muy pesadas , muy anchas,  capaces de aniquilar a una barricada de romanos , aun que en éste caso no era para aniquilar , si no para defender ,  ellos no empezarían ningún ataque a menos que le obligasen , y eso sería cuanto menos raro , pues ellos no eran ambiciosos , sólo buscaban defender sus playas , sus ciudades y su honor .



Etíocles estaba agarrando a una de las picas de madera , con su espada en una mano , afilando la punta de la pica , mientras otros dos soldados la aguantaban con él . Así con todas las picas , que fueron un total de doscientas y  la mitad de ellas muy puntiagudas , tan puntiagudas que Etíocles se pinchó varias veces  e incluso mancho sus dedos de sangre .


Tras dos horas haciendo tan arduo trabajo se puso en pie lentamente  y mandó a otros dos soldados a que atasen  las cuerdas en las mismas y anclasen algunas en la  arena , era un buen sistema de defensa que le serviría para cubrir ese camino .



~ ¡ Cuando terminéis descansad , los romanos y los cartagineses no pararán de traer hombres y nosotros le esperaremos  ! - Etíocles se dirigió hacia su tienda , fijándose en como el cielo poco a poco se abarrotaba con nubes negras que daban a entender que aquella noche sería una noche de lluvia y mucho frío  y eso no le convenía , pues esa misma noche el partiría a casa lo más seguro  , sólo para comprobar que su mujer estaba bien y podría  así darle algo del cariño que ambos necesitaban.




~ ¡ Señor , mi rey ! - Castos se bajó de su montura rápidamente y agarró  su brazo rápidamente , llevándolo dentro de la tienda , mientras  intentaba  calmarse y buscar su respiración , mirándolo con los ojos lleno de lágrimas debido a la asfixia .- ¡ Su ..su mu..su mujer !


~ ¡ Tranquilo , Castos , respira y dime que es lo  que ocurre ! - Etíocles comenzó a sentir miedo por lo que le estuviese pasando a su mujer , era un sitio seguro , pero  siempre cabía la posibilidad de que lo atacasen , pues Esparta no era tan segura como Troya .



~ Su..su-su mujer le es infiel mi señor ..la he visto con tres hombres , con tres soldados  , dos de ellos vigilando por orden de la reina Helena~ De repnte Etíocles golpeó su rostro , a su amigo de toda la vida y a su fiel compañero .


~ ¿ Cómo osas hablar así de Helena ? ~ Agarró su espada rápidamente y se acercó hasta él , mientras el mismo comenzaba a retroceder por el suelo con lágrima en los ojos , pues temía a Etíocles y sobre todo a su filo .



~ ¡ No le miento mi señor , es verdad ! ¡ NO ME MATE POR FAVOR ! ~El joven acabó tapándose el rostro , llorando del miedo que tenía pues no sabía que  hacer , si correr o defenderse , cualquiera de las dos eran imposibles de ver -




Etíocles miró  el miedo que tenía  a través de sus ojos , el miedo  y la verdad , él nunca le había mentido  , o por lo menos no hasta ese día , agarró una cuerda y tras eso sus manos , atándolas al asiento , que era muy pesado para él .



~ Voy a Esparta , iré sin que nadie me vea y veré lo que mi mujer hace , si es verdad lo que dices me disculparé ante ti y te daré lo que me pidas , viejo amigo ... Si de lo contrario me mientes , vendré a por ti y te cortaré la lengua.. ¿ Queda claro ? - Tras terminar de atar sus manos salió fuera y avisó a Stelio  , que acudió raudo a su llamada.


~ ¿ Necesitas algo ? -Dijo mientras terminaba de comerse un trozo de fruta que había entre sus manos , limpiando la misma de varias palmadas .


~ Necesito que controles al ejército , en caso de que no vuelva mañana por la mañana , y si vienen soldados romanos  , dile a Paulos que tire de las cuerdas atadas a las piedras , sólo mientras el ejército se acerque a atacarse  , una vez que se active esa trampa que los soldados formen alrededor de cada entrada una falange .- Se montó en el caballo de Castos y lo miró , Stelio parecía estar preocupado por algo , pero no sabía bien por qué.



~ Sí ,señor  , defenderemos en campamento lo mejor posible..



martes, 15 de abril de 2014

El mensajero..

Tras la ardua batalla , Etíocles se había encargado de tomar los barcos y todo lo que había en su interior , desde oro y bienes materiales que le ayudarían a pasar bien la guerra hasta esclavos , a los cuales liberó y junto a una patrulla de cien soldados les indicó que fuesen llevados a Esparta para que fuesen entrenados .
Cierta era que para poder estar en el ejército espartano se debía ser espartano se nacimiento , pero a esas alturas  cualquier soldado valía , siempre que no abandonase el campo de batalla



Antes de que partiese la escolta con los esclavos romanos , Etíocles escribió una carta para su amada , una carta en la que reflejó los primeros días de combate , el sufrimiento y la muerte , en la cual se estaban dando los orígenes de la guerra .
La carta de Etíocles decía lo siguiente:

'' Mi querida reina . Han pasado días desde que me fui y te dejé sola en Esparta , sé que fue difícil de asimilar , pero no me fui por gusto , si no por deber  , por el deber de encontrar la paz para Grecia y la seguridad suficiente para que tú y nuestros futuros hijos tuviesen la oportunidad de tener una vida decente , fuera de la guerra y la violencia .
No hay día que no piense en ti , desde  primera hora del amanecer hasta el ocaso .Espero que no te encuentres sola , ni que estés preocupada  , ya que tenemos la suerte de no haber tenido ni una sola baja  en nuestro ejército , sabemos defendernos , y hemos conseguido bastante  oro , comida y agua para aguantar y enriquecer a Esparta . Con suerte me tendrás allí dentro de tres días  , en caso de que la suerte y los dioses nos abandonasen , estaría allí en quince días , pues debemos poner mucha resistencia , pero a este ritmo  se cansarán ante los romanos que nosotros .


Te extraño , mi reina ..''






Etíocles le entregó a Castos la nota , y castos , fiel mensajero y amigo asintió y sonrió , montando en el caballo y retomando el camino hacia Esparta , el cual recorrió  en cinco días , debido a todas las paradas que tenía que hacer con el ejército y los esclavos , que estaban agotados y sedientos .
Una vez allí se dirigió primero a uno de los generales del ejército , que estaba entrenado a dos pelotones más de unos mil soldados en total , pocos eran , la cifra de soldados para entrenar ahora estaba en quince mil soldados  y subiendo  . Desde que Etíocles formó algunos edificios de protección y entrenamientos la cantidad de personas fueron aumentando , tanto las hembras como los barones estaban creciendo de una manera desmesurada y por suerte habían muchos generales entrenando al ejército , así que tanto la ciudad como su gente estaban a salvo de cualquier invasión .


~ Emírides , viejo amigo , te traigo una carta de nuestro rey , por lo visto está muy orgulloso de tu trabajo con los soldados , eres bueno entrenándolos , son fieros y resistentes- El joven de cabellos rizados y ojos verdes entregó en mano la carta a Emirides , que la miró con una sonrisa y se la dio a uno de los soldados , que la leyó en alto a todos los soldados que entrenaban .



~ Hacemos lo que podemos , por suerte aprenden rápido , muy rápido , aun que haya que empezar desde pequeños con ellos , son chicos muy valientes  , la verdad .- Se acercó a él lentamente y posó una mano sobre su hombro , dándole tras eso un leve abrazo .-¿ Algo más?



~ No , sólo una carta para la reina Helena , voy a entregársela y tras eso iré a Troya , Tebas y Atenas ,para avisar de lo que se avecina..~Tras despedirse ambos Castos se dirigió hacia la casa de los reyes , algo alejada de la ciudad y una vez allí  entró por el patio porticado hasta la sala  donde se encontraba la habitación de Helena , una vez allí llamó varias veces y pasó.




Lo que verían sus ojos esa noche sería algo que no vería nadie en siglos .
Helena se encontraba recostada sobre la cama , con tres hombres a su alrededor , uno de ellos entre sus piernas , con los pies atado a la parte de los pies de la cama y otros dos hombres  atados a dos barras  de hierro de la pared , cubriendo de besos el cuerpo de ella , junto a dos soldados que estaban obligados a cubrir la entrada . Uno de ellos se dirigió hacia Castos y agarró su mano , quitándole el manuscrito de la cama , para después  sacarlo fuera de la habitación a base de empujones .
Helena se levantó enseguida dejando a sus ''amantes'' atados a la cama , mientras corría ahora tras Castos que caminaba a paso ligero hasta su caballo . Una vez cerca lo agarró del hombro , tapada con sus mantas y lo miró con lágrimas en sus ojos .



~ No le cuentes nada a mi marido , me sentía sola y..~Antes de decir nada Castos se alejó de ella y montó a caballo , mientras se encaminaba hacia la salida de esparta , entre las voces de Helena que ahora le insultaban y le amenazaban de una manera muy agresiva .~ ¡¡ SI MI MARIDO SE ENTERA JURO QUE CORTARÉ TU CABEZA Y ME COMERÉ TODA TU PIEL , PERRO !!



Helena se había vuelto loca , loca y pervertida , pues lo que había hecho no tenía perdón ni para ella ni para su reino , y si se llegase a enterar Etíocles ella no sabría que hacer , le gustaba demasiado el trono , el dinero y todo el poder que concentraba , así que debería andarse con cuidado tanto ella como Castos , el mensajero.